Una explicación para cada término técnico
Literalmente la tabla clásica de Admonter en largos desde 1850 hasta 2400 mm.
Las juntas de dilatación pueden observarse en las puertas, en los puntos predeterminados de rotura de la solería, en los pilares, etc. y sirven para permitir que el suelo natural se dilate y se contraiga de nuevo en función de la temperatura y la humedad. Las juntas de dilatación son tareas exclusivas de un instalador de suelos especializado.
El bisel es un corte sesgado que se realiza en los bordes de las tablas. Mediante el biselado, en función de su tamaño, cada tabla queda resaltada y enfatizada individualmente.
Se llama parqué preacabado al suelo de madera cuyos elementos y tratamientos de superficie son producidos y completados industrialmente. En general, estos elementos están provistos de un perfilado y se ensamblan mediante el encolado (perfil machihembrado) o el fijado (perfil lock-it). Tras su instalación no requieren ningún tratamiento adicional como el lijado o el enmasillado.
Por regla general, la instalación de un suelo natural de Admonter sobre superficies calefactadas no presenta ningún problema. Para conseguir el mayor grado de eficacia térmica deberán seguirse con atención las especificaciones establecidas para su colocación y las indicaciones para su mantenimiento.
Muchos suelos laminados imitan el aspecto de un pavimento de alta calidad (mayoritariamente parqué), pero poseen una capa de soporte de reducido valor que se completa con una fina capa decorativa. Un suelo así, en comparación, por caso, con el parqué o el suelo cerámico de alta calidad, resulta económico y simple para su instalación. Sin embargo, todos los suelos laminados tienen una desventaja común: en caso de daños o de desgaste, no pueden ser saneados o pulimentados como un suelo de madera porque, bajo la capa decorativa, quedaría a la vista el material de soporte de forma inmediata.
Como su propio nombre indica, consiste en una sólida y completa capa de madera maciza. Sin embargo, este tipo de parqué tradicional no está exento de problemas, ya que tiende a deformarse de forma más notable que el parqué multicapa frente a los cambios de temperatura o humedad.
El parqué multicapa es más estable que el parqué macizo frente a las fluctuaciones de las condiciones ambientales porque las varias capas uniformizan las condiciones de humedad y temperatura del espacio y estabilizan el suelo. El parqué multicapa puede ser de 2 o 3 capas. En el parqué de 2 capas, la capa superficial, elaborada en la madera deseada, se fija a una capa de soporte. En el caso del parqué de 3 capas, la capa superficial queda unida a la capa de soporte, de la misma madera o de madera de aguja, mediante, a su vez, otra capa intermedia y transversal frecuentemente de madera conífera.
Suelos de 2 y 3 lamas. Un suelo de varias lamas también es un suelo en formato de tablas. Sin embargo, a diferencia del formato de tabla única, la capa noble no se crea con una sola pieza de madera, sino a partir de una gran cantidad de pequeñas tiras de madera. Por esta razón, un parqué de lama múltiple resulta, en comparación a un parqué de lama única, más económico.
En la instalación flotante del suelo, las distintas piezas se unen entre sí, ya sea en los casos de fijación por machihembrado o en las distintas variantes del sistema lock-it de Admonter, pero no son pegadas al soporte. En este supuesto, las ventajas son la de una rápida instalación, la escasa o nula aparición de levantamientos y la casi ausencia de transmisión de ruidos de contacto a la superficie.
En este caso, las tablas son pegadas a la superficie sobre la cual se colocan. Este tipo de instalación es la recomendada para los suelos calefactados, para los baños y, en general, para todos los espacios públicos. Las ventajas son: la posibilidad de instalación en una sola pieza para grandes superficies, la escasa aparición de abultamientos en suelos calefactados y la facilidad para su saneamiento mediante el pulido.
Con largos desde 590 mm hasta 1200 mm Indicado para instalación en espiga con la más pequeña varilla para obtener un aspecto de entablillado de gran resultado en pequeñas habitaciones.
Para grandes espacios y para obtener un extraordinario efecto. Tablas con largos de hasta 2800 mm Dimensión: 15x280 mm
Un cepillado realizado en 3D y con marcas de envejecimiento añadidas. Junta en V. Otorga al suelo nuevo de madera de aguja una pátina de décadas y proporciona la ventaja añadida de una especial resistencia y durabilidad.
Cada nudo tiene aquí su propósito. Las ondas, hendiduras y curvaturas, así como los diferentes grosores de la superficie en las lamas, proporcionan unas superficies muy variadas.
Mediante el cepillado, el tratamiento natural de las superficies crea un aspecto único y natural en la que se resalta cada irregularidad.
Un fuerte cepillado longitudinal y transversal hace perceptibles al tacto a suelos y paneles, otorgándoles un sugerente aspecto.
Las partes blandas de la madera son cepilladas. De esta forma, el suelo cobra una estructurada superficie. La sensualidad natural de la madera se hace visible y se advierte de forma única.
Esta nostálgica apariencia obtiene una elaboración actual. Los tableros hendidos por hacha constituyen una auténtica inspiración y no resulta extraño que aporten algo más que meramente el revestimiento de paredes.
Mediante el pulido en el sentido de la fibra se consigue una especial ondulación que conduce a un disfrute especialmente perceptible del suelo o panel de madera natural.
Durante muchos años la textura típica para los suelos de madera natural. La superficie, mediante el lijado, aparece elegante. La madera es totalmente lisa y las hendiduras son enrasadas.
Se trata de un intenso cepillado cruzado y parcial que presta a las tablas un especial aspecto y un tacto pleno de carácter. Cada tabla recibe un cepillado, bien en el borde, bien en el medio, bien toda la superficie. Del conjunto que resulta de su colocación mezclada, se produce la imagen tan singular de esta textura.
La clasificación describe características típicas del material natural de la madera (por ejemplo: nudos, fisuras…) y las ordena en diferentes clases según sea su número, presencia y también el tamaño. De esta manera, los suelos naturales de Admonter se clasifican en: libres de nudos (noblesse), con escasos nudos (elegance), nudosos (basic), rústicos con masilla marrón (naturelle) y rústicos con masilla negra (rustic).
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